El futuro de la pesca en España es muy desalentador para aquell@s pescadores que solo se interesen por la pesca de especies autóctonas.
La proliferación de las especies alóctonas es inevitable y a día de hoy se sigue fomentando su pesca por parte de las administraciones, lo cual sumado a la translocación de las especies por parte de los pescadores que no tienen conciencia del impacto que supone la introducción de especies alóctonas nos lleva a un futuro solo de especies introducidas.
La introducción del siluro en varios ríos y embalses de otra cuencas, es una realidad y solo hay que esperar unos 10 años para ver los devastadores efectos de su introducción, a lo que hay que sumarle también los peces pasto que acompañan a estas especies como puede ser el alburno, presente ya en la mayoría de los cursos medios y bajos de nuestros ríos.
En 10 años más o menos veremos como la gran mayoría de nuestros peces autóctonos que compartan agua con el siluro y el lucio se verán considerablemente mermadas o incluso desaparecerán como ya a sucedido en algún embalse y a punto de suceder en alguno más.
Como ejemplo diré que uno de los más grandes embalses de España, como es mequinenza su población de carpa ha descendido notablemente en los últimos 5 años, necesitando hasta 3 días para conseguir una captura.
Estoy convencido de que hasta el más insensible con estas actuaciones se acabará arrepintiendo, llegará a lamentar haber introducido especies en lugares nuevos, simplemente por tenerlas más cerca de casa o por ver una fuente de negocio a costa del daño al medio ambiente.
Ojalá me equivoque, pero no tardaremos mucho en ver otro Mequinenza en Tajomar o embalse de Alcántara con sus tiendas de pesca, alquiler de embarcaciones, guías, etc.... todo por que a algún lumbreras se le ocurrió introducir el siluro.
Gran parte del problema radica en que las administraciones nunca han querido coger el toro por los cuernos, y hasta que la comunidad Europea no se ha puesto seria con este tema nada se ha hecho y ahora a lo mejor ya son inútiles todas las medidas, desde luego que una medida eficaz seria vedar todas las masas de agua en las que aparezca una nueva especie siempre y cuando esta norma se publique de inmediato, ya que seria el método de disuasión más eficaz para evitar estos atentados ecológicos, quien van a introducir una especie nueva si no se va a poder pescar. (Bueno a lo mejor algún desalmado).
Es triste tener que escribir estas cosas pero es lo que hay.
La proliferación de las especies alóctonas es inevitable y a día de hoy se sigue fomentando su pesca por parte de las administraciones, lo cual sumado a la translocación de las especies por parte de los pescadores que no tienen conciencia del impacto que supone la introducción de especies alóctonas nos lleva a un futuro solo de especies introducidas.
La introducción del siluro en varios ríos y embalses de otra cuencas, es una realidad y solo hay que esperar unos 10 años para ver los devastadores efectos de su introducción, a lo que hay que sumarle también los peces pasto que acompañan a estas especies como puede ser el alburno, presente ya en la mayoría de los cursos medios y bajos de nuestros ríos.
En 10 años más o menos veremos como la gran mayoría de nuestros peces autóctonos que compartan agua con el siluro y el lucio se verán considerablemente mermadas o incluso desaparecerán como ya a sucedido en algún embalse y a punto de suceder en alguno más.
Como ejemplo diré que uno de los más grandes embalses de España, como es mequinenza su población de carpa ha descendido notablemente en los últimos 5 años, necesitando hasta 3 días para conseguir una captura.
Estoy convencido de que hasta el más insensible con estas actuaciones se acabará arrepintiendo, llegará a lamentar haber introducido especies en lugares nuevos, simplemente por tenerlas más cerca de casa o por ver una fuente de negocio a costa del daño al medio ambiente.
Ojalá me equivoque, pero no tardaremos mucho en ver otro Mequinenza en Tajomar o embalse de Alcántara con sus tiendas de pesca, alquiler de embarcaciones, guías, etc.... todo por que a algún lumbreras se le ocurrió introducir el siluro.
Gran parte del problema radica en que las administraciones nunca han querido coger el toro por los cuernos, y hasta que la comunidad Europea no se ha puesto seria con este tema nada se ha hecho y ahora a lo mejor ya son inútiles todas las medidas, desde luego que una medida eficaz seria vedar todas las masas de agua en las que aparezca una nueva especie siempre y cuando esta norma se publique de inmediato, ya que seria el método de disuasión más eficaz para evitar estos atentados ecológicos, quien van a introducir una especie nueva si no se va a poder pescar. (Bueno a lo mejor algún desalmado).
Es triste tener que escribir estas cosas pero es lo que hay.
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